viernes, 3 de octubre de 2014

Hacer cardio ¿Antes o después de las pesas?


Es de conocimiento general que hacer un poco de cardio antes de comenzar con nuestra rutina para tonificar el cuerpo es una de las mejores formas para calentar los músculos y con ello, evitar posibles lesiones. Sin embargo, mucho se debate sobre este tema, y es que hay quienes aseguran lo contrario, es decir, que algunos afirman que es mejor realizar cardio luego de la rutina de tonificación y musculación, sobre todo cuando se trata de levantar pesas.



La pregunta no ha quedado en el aire y cada vez son más lo que se dan la tarea de investigar sobre el tema, llegando a una conclusión satisfactoria obtenida a base de publicaciones realizadas en las que se determina la respuesta final luego de una cuantiosa serie de estudios científicos y de alto valor.

Para responder a esta cuestión hay que dar un paso atrás y enfocarse en los principios básicos del fitness. Primeramente definiendo cardio; un ejercicio para aumentar la frecuencia cardiaca a través de actividades con un ritmo bajo o moderado que buscan utilizar el potencial del cuerpo tomando como fuente de energía a las grasas y el glucógeno (este en menor medida), complementándose con la presencia de oxígeno (ejercicio aeróbico).

Las pesas al contrario requieren de un esfuerzo constante para llevarse a cabo correctamente, donde el músculo trabaja en su máximo potencial, necesitando como combustible principal al glucógeno y los aminoácidos del mismo y sin la la presencia de oxígeno (ejercicio anaeróbico), por lo que el número de calorías quemadas es mucho menor en comparación a cuando se realizan ejercicios de cardio.

¿Qué significa esto?
A partir de esta información podemos concluir que realizar la rutina de pesas antes del entrenamiento cardiovascular siempre es mejor. Si aún no has captado el por qué, aquí va la razón.

Como ya venía explicando más arriba, al hacer cardio se necesita utilizar las grasas del cuerpo como fuente de energía principal, pero además de ello también se requiere del uso de glucógeno, la misma molécula que requieren los músculos para poder hacer una exitosa rutina de pesas. Esto se traduce en lo siguiente: al realizar un tiempo considerable en la bicicleta elíptica, la escaladora o cualquier otro equipo para aumentar la frecuencia cardiaca, se utilizan el ya mencionado glucógeno (como sustento de energía secundario), por lo que las reservas del mismo comienzan a ser utilizadas incluso antes de comenzar el entrenamiento con pesas. Finalmente, es posible que la rutina se vea interrumpida antes de acabarse o que en caso de completarla, hacerlo de forma menos intensa y por lo tanto, trabajando el músculo en menor medida.

La conclusión es obvia, realizar ejercicio cardiovascular antes de comenzar con las pesas nunca es aconsejable. Si la rutina no se hace de forma correcta e intensa, la hipertrofia muscular nunca se llevará a cabo, o lo que en un lenguaje menos técnico podríamos traducir como el hecho de que el proceso de crecimiento de las células y fibras musculares (y por lo tanto del músculo) nunca llegará. Y lo que es peor, que si el glucógeno se agota y los aminoácidos son utilizados en mayor medida como energía, podría presentarse el fenómeno del catabolismo muscular (pérdida de masa muscular).

EJEMPLO: 10 min de cardio (para calentar) , luego tu rutina de pesas por 45 min. Max una hora. Y DESPUÉS, cardio por 45 min, si estás en plan de bajar de peso o definir. 

jueves, 2 de octubre de 2014

Beneficios de la miel en la recuperación del atleta


Desde la antigüedad la miel ha sido considerada un tesoro de alimentación y belleza. En Egipto era considerada como “el néctar de los dioses”. Posee muchas propiedades para beneficio de la salud, tanto terapéuticos como nutricionales, aumenta nuestra resistencia, por la gran cantidad de glucosa que nos aporta. Debido a su procedencia natural, uno de los  principales Beneficios de la miel, es que se asimila de una forma mucho más rápida que geles u otros suplementos alimenticios, aunque pueden combinarse también perfectamente, acelerando la capacidad de recuperación.

Cuando hacemos deporte nuestro organismo consume las reservas de glucosa, haciendo que nuestros niveles de azúcares disminuyan enormemente, y nuestros músculos pierdan vitalidad Por ello es fundamental mantener estos niveles de glucosa en perfectas condiciones.  Muchos deportistas consumen miel durante la práctica del ejercicio para retrasar la fatiga. Para ello una práctica habitual es añadir un poco de miel en nuestra botella de agua, asegurándonos de que la misma esté bien diluida.

Algo similar sucede después del entrenamiento, y es que los músculos han estado sometidos a un alto desgaste, por lo que es necesario reponer los azúcares y los minerales perdidos para así lograr una recuperación mucho más rápida.  Después de realizar cualquier práctica deportiva (sobre todo si la misma ha sido elevada) nuestro cuerpo pierde energía,  por esto se recomienda tomar una cucharada de miel después de hacer deporte, ya que de esta forma estaremos recuperando todos los azúcares y minerales perdidos durante el entrenamiento.


Otra de las ventajas observadas en el uso de la miel es que, cuando se combina con un suplemento proteínico, la capacidad de recuperación de los músculos ante una sesión de ejercicios es mayor que en el caso de otros azúcares.  En síntesis, la miel proporciona la misma energía y ventajas que proporciona la glucosa en el deporte de alto rendimiento, además de incentivar la resistencia ante el esfuerzo y aportar sustancias esenciales para el organismo.

fuente: caribbeanfit

miércoles, 1 de octubre de 2014

Beneficios de correr lento

Sin dudas, correr mas rápido suele ser uno de las metas mas buscadas por la mayoría de los corredores.
Por ello, muchos corredores (sobre todos los principiantes), cometen el error de creer que para mejorar deben realizar todos sus entrenamientos a tope y que los entrenamientos lentos no sirven para nada.
Otros utilizan, las clásicas excusa de: “no puedo correr lento“, “me aburro“, “me siento torpe” y otras tantas.
Por ello, a continuación te contaremos cuales son los beneficios de correr lento para mejorar cómo corredor y en definitiva lograr correr mas rápido:


Sistema aeróbico vs anaeróbico
Para movernos necesitamos de combustible y para ello, nuestro cuerpo tiene dos principales fuentes de energía: los carbohidratos (almacenados en nuestros músculos e hígado como glucógeno) y las grasas. Las proteínas también pueden ser utilizadas como fuente de energía, pero de manera muy inferior y excepcional.

Para lograr utilizar estas fuentes de energía, nuestro cuerpo trabaja con 2 sistemas energéticos diferentes, el sistema aeróbico y el anaeróbico.

El sistema aeróbico puede usar carbohidratos, grasas o proteínas para producir energía (de manera lenta, pero mucho mas eficiente que el sistema anaeróbico).
Para lograr la producción de energía, el sistema aeróbico necesita de oxígeno y es por ello que este sistema tiene preponderancia cuando corremos a ritmos lentos y no necesitamos energía de manera tan rápida.

Cuando necesitas energía en forma rápida y constante y el oxígeno que respiras no es suficiente, el sistema anaeróbico entrará en funcionamiento y te abastecerá de  energía producida sin la utilización de oxígeno, de manera mucho mas rápida que el aeróbico pero con una duración mucho menor.

Estos sistemas energéticos nunca trabajan en forma absoluta, es decir, la energía que utilizamos al correr nunca proviene 100% aeróbicamente o anaeróbicamente (hay influencia de ambos).

Tan importante es el sistema aeróbico, que en distancias como los 10 kilómetros, el medio maratón y el maratón, su contribución es superior al 90% (mas información aquí).

Es decir el 90 % de la energía que utilizamos en esas distancias proviene del sistema aeróbico y de allí radica la necesidad entrenar a nuestro cuerpo a trabajar de manera eficiente a ritmos lentos.


Evitan Lesiones
Correr rápido todos los días o en cada entrenamiento aumentará el riesgo de que te lesiones y te sobreentrenes.

Luego de un entrenamiento duro (tempo, fartlek, series, etc), nuestro cuerpo sufre microdesgarros en las fibras musculares, deshidratación, agotamiento de las reservas de glucógeno, etc.

Como consecuencia de estos efectos del entrenamiento duro, será necesario que nuestro cuerpo tenga el tiempo suficiente para recuperarse y adaptarse, y correr rápido todos los días inevitablemente lo impedirá.
Ante ello, después de un entrenamiento duro, deberías optar entre tomarte un descanso completo o un descanso activo mediante un entrenamiento lento.

Por ello, correr lento puede ayudarte a evitar lesiones por sobrecarga y lograr la constancia que muchos corredores necesitan.


Evita el sobreentrenamiento
Además de exponerte a un gran riesgo de lesionarte, correr duramente todos los días te hará acumular cansancio y te acercará al sobreentrenamiento, lo que hará que tu rendimiento baje y tus entrenamientos no sean efectivos.

Cada entrenamiento de tu plan, debería tener un objetivo definido, los entrenamientos lentos pueden ayudarte a recuperarte y a correr una gran cantidad de kilómetros y así entrenar tu resistencia.

Los entrenamientos a una velocidad elevada, te ayudarán a mejorar otros aspectos, pero te someterán a un mayor desgaste.


Podrás correr mas kilómetros
Si  deseas correr una mayor cantidad de kilómetros de manera segura (intentando no lesionarte), será necesario que disminuyas la intensidad de tus entrenamientos.

Es decir, durante la fase de tu entrenamiento  donde dispongas aumentar tu kilometraje, deberás evitar los entrenamientos de velocidad y correr a ritmos lentos y/o moderados.

Una forma segura de correr mas kilómetros y mas tiempo, es realizando “Entrenamientos Tortuga” día tras día.

Puede parecer aburrido y/o inutil, pero es una forma segura y efectiva, de correr mas kilómetros y mejorar aeróbicamente, evitando las lesiones.

fuente: runfitners